Eso significa que ya nos quedan menos de 12 horas para partir, mañana será un día duro, aunque confío en que al ser el primero no nos cansemos tanto por aquello de que vamos frescos y la ilusión que llevas hace que no te duela nada.
Hemos quedado en un rato con Gus para tomar una birroncha fresquita, concretar sitio y hora de salida, y pasarle unas viandas que hemos preparado para el almuerzo de mañana y de algún día mas, entre camino y camino, por aquello de reducir un poco el gasto, (maldita crisis).
Así que la próxima vez que escribamos algo ya será desde la carretera, metidos en harina de pleno en esta aventura que espero sea la primera de muchas del mismo calibre.
HASTA MAÑANA
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